viernes, 15 de mayo de 2015

Ni una palabra más

En la ciudad de New York había una cantidad de robos.
En la cuna de ladrones vivía Jonás, un humilde ladrón que robaba por su novia Dennis.
Una noche, todos asaltaron la joyería “Esmeralda”  pero Jonás no hizo nada ni dijo ni una palabra más, como si se hizo un nudo en la garganta.
Llego la policía de New York  y arresto a los ladrones pero el hombre de traje oscuro quien era el jefe de ladrones y Jonás escaparon.                                     
 
Jonás se subió a la cima de un auto para intentar escapar de los policías
¡Salta rápido! dijo el hombre de traje oscuro, la velocidad del auto era sobrellevable y Jonás decidió saltar al extremo de la pista hacia el barranco.
Al pisar tierra sus manos se tornaron un rojo puro pero lleno de tierra.
Siguió su camino a su ciudad natal pero llego a la ciudad de las películas. Llego la policía y lo arrestaron por robar en New York la joyería “Esmeralda”.
Los oficiales intentaron hacer que Jonás explique en donde están las joyas, pero Jonás no quería decirle ni una palabra. En el día de la corte apareció el hombre de traje oscuro el cual fue el culpable del robo en la joyería “Esmeralda”.
 

El hombre de traje oscuro oculto, sin ser visto, las joyas en el traje de Jonás. “Ahí lo ven es nuestro ladrón robo todo¨ grito con más fuerza el hombre de traje oscuro. Los oficiales se llevaron a Jonás a que lo ejecuten, cuando él volteo su cara vio que el hombre de traje oscuro era su novia Dennis mirándola sonriendo entre dientes.